Fitoterapia ¿De qué forma se puede administrar?

La fitoterapia consiste en el tratamiento de las enfermedades y dolencias con recursos que ofrece la naturaleza mediante los vegetales. Esta no es una terapia moderna, es tan antigua como es el mundo, apareció ante la necesidad del hombre de recuperar y mantener la salud.
 

La fitoterapia no es exclusiva del ser humano, los animales hacen uso de las plantas para sanar sus dolencias de forma instintiva y natural. Esto demuestra que el reino vegetal suministra los elementos necesarios para la supervivencia de las especies en el planeta.

De hecho, según un artículo de la web BBC Mundo "Estudios sobre primates revelan que la ingesta de plantas no digeribles purga el sistema intestinal de parásitos helmínticos. Dado que prácticamente todos los carnívoros salvajes sufren una carga de parásitos intestinales, el consumo regular e instintivo de plantas tendría un papel adaptativo para mantener una carga tolerable de parásitos en su sistema digestivo, independientemente de que el animal detecte o no los parásitos".
 

En la actualidad la fitoterapia presenta los tratamientos ideales para prevenir y mejorar enfermedades que aquejan a la humanidad, bien sea provocada por agentes externos como por la constitución biológica de cada ser humano.
 

Existen muchas formas de clasificar la administración de la fitoterapia, tomaremos la siguiente para tener una idea clara de cómo se debe dar uso a los distintos productos extraídos de la naturaleza de forma racional y segura. Entre las diferentes maneras por las cuales los preparados pueden ser administrados, encontramos:
 

1. Productos farmacéuticos químicos

2. Productos farmacéuticos naturales

3. Recetas ancestrales

 

1. Productos Farmacéuticos químicos
 

Mediante la manipulación bioquímica se pueden formar extractos de aplicación oral, parental o de uso tópico en distinta presentaciones, pueden ser cápsulas, jarabes, pomadas, polvos, supositorios, óvulos entre otras formas de comprimir los elementos medicinales de las plantas. En este caso es bueno que te preguntes ¿Qué son los productos excipientes? En farmacéutica se refiere a una sustancia inactiva usada para incorporar el principio activo. Además pueden usarse para ayudar al proceso de fabricación de un producto. Por ejemplo se mezcla con los medicamentos para darles consistencia, forma, sabor u otras cualidades que faciliten su uso.

 

Veamos las distintas formas de preparados de la industria farmacéutica:
 

De manera Sólida, estas por lo general son de administración oral, está formada por: los polvos, granulados, las capsulas y los comprimidos.

De Forma Líquida, estas pueden ser de uso interno o externo, presentándolo la industria farmacéutica, en forma de gotas y jarabes los cuales se usan las sacarosas y melitos, con uso de la miel como principal componente, emulsiones de uso oral o parenteral. Para usos externos presentan las lociones, es una forma líquida, bien sea una disolución, suspensión o emulsión, para ser aplicada externamente sin friccionar. El excipiente es acuoso.
 

Los Elixires son especies de licores obtenidos por medio de los extractos acuosos, alcohólicos o disueltos en alcohol. Finalmente en linimentos y lociones que son de uso externo.
 

De forma Semisólida, aquí se destacan las pomadas y ungüentos que son productos semisólidos, los cuales usan productos grasos de excipiente, por lo que es recomendable utilizar extractos oleos, aceites esenciales o extractos alcohólicos, pastas, cremas, geles preparados por extractos acuosos, alcohólicos o glicólicos, tomando en consideración la concentración  de extractos usados que pueden afectar la consistencia.

 

Colodiones, el colodión es una solución de nitrocelulosa en una mezcla de éter y alcohol que fue descubierto por Louis Menard en 1846.​ Los colodiones se encargan de disolver el extracto en el excipiente recomendado, formando una sustancia insoluble y otra soluble que se evapora. Dejando el extracto disuelto y no volátil. Como ejemplo de ello encontramos los óvulos vaginales y lápices labiales.
 

 

2. Productos farmacéuticos naturales
 

Algunos preparados para la fitoterapia, ya están elaborados por la industria farmacéutica. La cuales tienen todos los componentes y tratamientos sometidos hasta obtener los extractos medicinales y curativos de las plantas además de las formas de presentación del producto, y la forma de administración, bien sea externa o interna. Al decir productos farmacéuticos naturales, nos referimos a aquellos productos que no han sido sometidos a tantos procedimientos químicos y por lo tanto es un intermedio entre los fármacos procesados y las recetas caseras.

En este caso podemos mencionar los mismos productos mencionados en los productos farmacéuticos químicos. Pero ¿Cómo diferenciarlos? En la presentación de los mismos, de hecho en muchas tiendas o farmacias naturistas tienden a vender este tipo de fármacos. Los cuales pueden variar entre elixires, ungüento cápsulas blandas...

En cuanto a la dosificación se debe tener cuidado con el volumen del contenido en cada cápsula. Al igual que tomar en cuenta todos los indicativos sanitarios, composición, miligramos, recomendaciones para su uso, farmacia que lo patrocine, entre otros lineamientos para la administración de forma segura del producto a pacientes con sintomatologías propias para ser tratada con dichos medicamentos.

Por otra parte la industria naturista se ha expandido en gran media. De hecho en CIFES, nuestra escuela trabaja de la mano con Hills Garden, quienes se caracterizan por ofrecer productos cosméticos de excelente calidad en el área. Como por ejemplo: aceites corporales, jabones, accesorios y más...

 

3. Recetas ancestrales

La Fitoterapia es un tratamiento natural y reúne la ventaja de encontrar poco rechazo por parte del organismo del ser humano. Sin embargo, el uso de las plantas medicinales se debe hacer con conocimiento porque pueden presentar efectos perjudiciales sobre todo si se abusa en su administración. A continuación te presentaremos algunas recetas ancestrales o caseras:

 

Vahos, el cual se realiza mediante la vaporización de sus aromas, los vahos son ideales para el tratamiento de resfríos y enfermedades del aparato respiratorio, ya que consiste en respirar el vapor que despide una sustancia al hervirla. La pulverización es otra forma de preparación, la cual puede administrarse directamente en las cavidades bucofaríngeas.

En la web mejor con salud, podrás encontrar todos los detalles sobre la siguiente receta de vahos a base de belladona:

Ingredientes

   
    3 hojas de belladona

   
    3 cucharadas de hojas secas para los bronquios: eucalipto, tomillo, romero, orégano (45g)

   
    5 vasos de agua (1 litro)
 

Para preparar la decocción:

   
    Poner el agua a hervir en una cazuela.

   
    Añadir las plantas medicinales y dejar que se realice la decocción durante 10 minutos.

    Apagar el fuego y reposar 5 minutos.

   
    Proceder a realizar los vahos sin esperar.

Las infusiones no se pueden dejar a un lado, ya que son un clásico en el mundo de la medicina alternativa. Claro está que existen tanto tipos de infusiones como plantas en el mundo. Además es conveniente asesorarse siempre con alguien que posea conocimientos en el tema, ya que mezclar algunas plantas puede llegar a producir efecto que perjudiquen el bienestar de una persona, como pro ejemplo intoxicación o diarrea.

Por otra parte podrás encontrar un fuerte aliado natural si sabes la forma correcta de mezclar las plantas, a continuación te recomendamos las siguientes infusiones:

Cebolla y eucalipto. Ideal para dilatar y depurar los bronquios congestionados.

Ingredientes:

    1 litro de agua (1000 ml).

    2 cebollas.

    2 cucharadas de miel (50 g).

    Eucalipto (100 g).

 
Té verde, cúrcuma y piel de limón. Ideal para descongestionar

Ingredientes:

    Té verde (15 g).

    Cúrcuma (3 g).

    La piel de medio limón

    1 cucharada de miel (25 g).

    1 vaso de agua (250 ml).

► Jengibre, eucalipto y limón. Mejora la salud del aparato respiratorio.

Ingredientes:

    Un vaso de agua (250 ml).
 

    Jengibre rallado (3 g).
 

    1 cucharada de jugo de limón (15 ml).
 

    4 hojas de eucalipto.

    1 cucharada de miel (25 g).
 

El modo de preparación de estas recetas es similar, primero dejas hervir el agua, añades los ingredientes y esperas 20 minutos. Luego podrás tomarlo. Como verás también puedes endulzarlos con miel, en estos casos lo ideal es evitar la azúcar procesada. Podrás conocer más detalles sobre estas recetas haciendo clic en mejor con salud.