Anatomía de la uña y sus partes

Formación de las uñas

Las uñas son formaciones córneas de origen epidérmico, de consistencia dura, que recubren la parte dorsal de la falangeta de los dedos de las manos y de los pies. Sus principales componentes son: queratina, aminoácidos, agua, lípidos y minerales.

En el ser humano las uñas contribuyen en la acción prensil de los dedos sirviendo a su vez de protección de estos. La formación de las uñas comienza en el tercer mes de gestación, empezando por una matriz que abarca la raíz de la uña. A partir de ahí se irá formando una placa traslúcida de células córneas que formarán la uña.

El crecimiento de las uñas tiene lugar en la matriz ungular, donde estas sufren un proceso de queratinización. Es decir, a medida que las células avanzan hacia el exterior van cargándose de queratina, sustancia que segregan las células de la epidermis.

Detalle transversal de la estructura de la uña.

La queratina que forma la uña puede ser dura cuando es rica en azufre, como en el caso de las uñas y el pelo, o blanda cuando tiene poco contenido en azufre como es en el caso de la piel. Las uñas, una vez formadas, son láminas rectangulares convexas, duras, flexibles, traslúcidas y poseen estrías longitudinales que se acentuarán con la edad.
 

Estructura de las uñas

Antes de dar inicio a cualquier tratamiento en la zona de las uñas, es muy importante conocer su anatomía o como está estructurada, con el fin de que tengas claro cuáles son las zonas que has de manipular y cuáles son los límites que no debes tocar a fin de evitar molestias.

Por ejemplo, claro está el hecho de que el cuerpo de la uña es la parte superficial de la misma, siendo la zona donde se aplica el esmalte y que en el borde libre de la uña es donde se puede limar para dar forma, generar una superficie lisa y proporcionada según el diseño que se desee dar. Por otra parte, en el borde libre es donde se da ese acabado de maquillaje francés al pintar la zona con esmalte blanco y el resto dejarlo con brillo.

Estructura de la uña.

En ocasiones el cuerpo de la uña puede ser ligeramente limada, con el fin de mejorar la superficie de la misma, esto es algo que generalmente se realiza al momento de querer aplicar sistema de uñas acrílicas o de gel, sin embargo, se debe tener cuidado de llevar a cabo un limado ligero a fin de no desgastarla en exceso y causar dolor.

Como verás una vez que se conoce como está estructurada la uña es mucho más sencillo saber como tratar esta zona del cuerpo. Ten presente que debajo de ella se encuentran terminaciones nerviosas, por lo que es una zona que al momento de limar se debe hacer con intervalos cortos de pausa con el fin de no causar molestias