Principios activos: exfoliantes

¿Qué son los exfoliantes?

Son aquellos productos que se encargan de limpiar a profundidad la piel, para así liberarla de células muertas e impurezas, obteniendo como resultado una piel más suave y radiante.
 

Gracias al masaje facial que se realiza al momento de aplicar este tipo de productos, es posible activar la circulación sanguínea, mejorando aún más la salud cutánea y su estética. 

Existen diferentes tipos de exfoliantes, los cuales se adecuan según las necesidades y características cutáneas de cada persona y, también, dependiendo del área del cuerpo a tratar ya sea el rostro, el abdomen o los pies. El tipo de piel del paciente debe ser tenido en cuenta, bien sea que se trate de una piel seborreica o deshidratada.

La exfoliación es esencial para liberar la piel de estas células muertas, consiguiendo que se vea radiante, tersa y más luminosa de forma inmediata. Además, al retirar las células muertas de forma regular, se previene la congestión de  poros y, por tanto, la formación de impurezas en el rostro.
 

La exfoliación forma parte de cualquier rutina de belleza, pero se debe tener presente que antes de realizarla es imprescindible una adecuada limpieza facial. Es importante recordar que al exfoliar la piel se retiran células muertas, por lo que, es ideal primero deshacerse de cualquier otra impureza, para tener mejores resultados; por ello tu enfoque, debe ser el realizar una correcta limpieza facial antes de cualquier otra cosa.
 

¿El exfoliante corporal se puede utilizar en el rostro?

No, los exfoliantes corporales funcionan para pieles más gruesas como por ejemplo los codos y las rodillas. En cambio, los exfoliantes faciales son para pieles más delicadas en comparación con el resto del cuerpo. Por lo tanto, si se utiliza un exfoliante corporal en el rostro, es posible que se retiren muchas capas externas de la piel, dejándola irritada.